lunes, 30 de agosto de 2010

¿Que es lo que hay que hacer?

¿Que es lo que hay que hacer
para poder respirar
y no morir cuando te vea
y no morir si te me vas?

¿Que es lo que hay que hacer
para parar esta agonía
que consume los pulmones
de mi alma ya perdida?

Dime ¿Que he de hacer
cuando te veo cara a cara?
Si tus palabras acarician mis oídos
y mis manos mueren paralizadas

Dime musa mía
¿Como hacer para vivir?
si muero estando a tu lado,
si muero estando sin ti.

Tengo un problema contigo


Tengo un problema contigo
no lo puedo evitar,
Tengo un problema contigo
difícil de explicar.
Y es que no se de que color es el cielo
no diferencio la sombra y la luz
ni se cuando es verano o es invierno
ni se por que te quiero
Dime tú.

No concibo...


No concibo una lágrima
donde nunca hubo una sonrisa.
No concibo una mujer
donde nunca hubo una niña.
No concibo la muerte
donde nunca hubo vida.
No concibo un problema
que no tenga salida.

Abrazado a la ventana (Partes I y II)

PARTE I

Alta fue la caída,
vivió el muerto.
Echó sal en las heridas
renunció al ungüento.
Su vida se perdió, pero el andaba,
no quedó motivo, no quedó hazaña,
no quedaron sueños, no quedó nada.

Abrazado a la ventana
compartiendo humo con el viento,
encontró un problema en el cosmos
y una solución en el tiempo.
Aceptó que el mundo estaba arapiento,
que también llevaba la belleza por dentro
y contó de uno en uno hasta el final del cuento.


PARTE II

Abrazado a la ventana
hablo con la brisa nocturna.
Me habla de futilidad
y yo le respondo con humo,
residuo del poder de mis neuronas
beso maternal del cosmos.

Corazón Impío


¿Es un error lo que siento?
Quizás me equivoqué
No se lo que me dice este corazón impío
nunca lo he sabido, nunca lo sabré
y sin embargo se que el me guia
yo sus latidos intento entender
pero ya no se si juegas con mi mente
o si de ira me quieres ver arder.

Dime corazón mio
¿Por que el mal me quieres buscar?
yo que siempre seguí tu camino
con los ojos cerrados y sin lugar para dudar

Dime corazón impío
hoy me rebelo, hoy te he de hablar
¿Por que me llevas por estos caminos?
¿Por que conviertes mi valle en un mar?

¡Ay! pobre de ti corazón invicto
teme por tu gobierno, teme por tu hogar
¡Ay! pobre de ti corazón de lino
tu red se deshilacha y con ella
morirás.

domingo, 29 de agosto de 2010

Es la misma canción.


¿Que vienes buscando?
si aquí solo estoy yo
escribiendo en un cuaderno
es la misma canción.

Y es que el tiempo pasa
aunque crea yo que no
se detiene y se retrasa
o se acelera sin razón
No hay segundo en vano
no hay trampa ni cartón
nadie se esconde de su influjo
es la misma canción.

Pero no debes temer
esta nueva sensación
de que todo lo pasado
siempre fue mejor
pues el pasado fue presente
y el futuro es invención
que tienes entre tus manos
es la nueva canción.

lunes, 2 de agosto de 2010

La increíble historia de Antunio el imbecil inmortal: Prologo prefacial

Antonio tenía tres años cuando murió por primera vez, a pesar de que fuera inmortal. Por aquel entonces hablaba húngaro bastante fluido, aunque sus padres pensaban que era idiota y no sabia hablar. Si le hubieran preguntado a su niñera húngara se habrían dado cuenta de que tenían un crío bastante espabilado, pero claro, murieron antes de darse cuenta. Murieron de hecho por primera vez con su hijo Antonio en un accidente de avión Madrid destino las Bahamas que tras despegar con el tanque de gasolina vacío se estampó terriblemente a las afueras de un pueblo ya inexistente de la provincia de León. Pero claro, sus ricos padres no eran inmortales, con lo que murieron por primera y ultima vez.
Fue un hecho curioso el transcurso del accidente; su madre salió despedida del avión con su hijo en brazos estando los dos en llamas, como valiente acto reflejo de supervivencia ella cogió a su hijo para caer sobre él, pero claro, Antonio era inmortal, cosa que su madre desconocía, con lo que él sobrevivió mientras esta moría debido a un fuerte traumatismo craneal producido por el choque contra la frente de su hijo, ahora conocido como Antunio pues tristemente la pulsera de su muñeca con su nombre no era inmortal y se vio con media O amputada, quedando marcado como Antunio o Tuño para los allegados, por el resto de su vida.

Antunio fue puesto entonces en adopción y fue tal la cantidad de familias que quisieron adoptarle por la repercusión mediática que tenía el niño superviviente que decidieron subastarlo para sacar fondos para el orfanato.
La justicia (la cual no hacia justicia a su propio nombre) tomó entonces la incoherente decisión de dar a Antunio en adopción a una famosa pareja de esas que nadie conoce, la cual se había conocido en la reedición de la fusión entre gran hermano y el encantador de perros, programa que por cierto batió todos los records de audiencia por los inteligentes ladridos de los que hacían gala los concursantes humanos en el confesionario a cambio de galletitas con forma de diamante glaseadas con cocaína del Corte Ingles.
Como anécdota apuntaré que el ganador fue un mastin leones cuyos ladridos eclipsaban a todo el que se enfrentaba a él, fue líder de audiencia en todos los descorazonadores programas del corazón, hasta su muerte en un glamuroso club de la capital.
Marijose y Josemari, que así se llamaban los padres adoptivos, más que un matrimonio tenía un acuerdo comercial, pues la unión de sus nombres vendía, y teniendo en cuenta que no sabían mucho más que decir sus nombres, era una gran oportunidad para ambos.
Pero como suelen decir no hay mal que por bien no venga y Antunio pudo recibir por primera vez en su vida amor de unos padres, siempre y cuando fuera frente a una cámara y cobrando, aun así era más de lo que había recibido en toda su vida.

Una vez pasada de moda su fama y gloria a la tierna edad de 9 años perdió el poco caso que le hacían sus padres adoptivos lo que le privó de una mínima educación, pues nunca le escolarizaron ni aprendió de sus padres a los cuales no veía y fue peor aun pues ni el auto-aprendizaje le servia, ¿Como aprender a base de golpes siendo inmortal? Sin la capacidad de sentir dolor el "ensayo y error" quedó aniquilado y Antunio llego a los 18 años con su cerebro en modo de hibernación, hasta un milagroso día en el que Antunio empezó a vivir por primera vez en su vida y es justo ese día donde empieza esta increíble historia.